Lo que al principio era una afición distintiva de nuestra etapa generacional y de libertad, luego se convirtió en un hobby apasionante. Poco a poco, sin darnos cuenta, el círculo se cierra y nos vemos reflejados en nuestros hijos y sus amigos, que ahora empiezan a rodar en moto y por la vida.
Detrás mío, Pau, Patricia (mi hija menor) y Marcos, cerca del Caos de Targasonne, falta el autor de la foto, Eduard. Y aún falta otra persona más, el bueno de Juan, que me dejó su afinada y bien conservada Cota 247, pero que por desgracia y debido a un golpe fortuito, tuvo que quedarse en casa.
Cualquiera diría que están hablando entre ellas, casi 20 años las separan, ¿que se dirán? (al fondo La Molina y Massella).
Hola Fernando, pues la verdad es que el mundo de las motos sigue vivo en todas las edades. Espero que podamos hacer otra excursión como esta! Te felicito por este blog, lo encuentro muy interesante y entro muy a menudo para estar al tanto de las clásicas y las no tan clásicas.
ResponderEliminarLas motos siempre serán un imán para los jóvenes. Mi duda es si "nuestras" motos, las que nos tocó vivir, acabarán sus días abandonadas por nuestros hijos. Yo creo que sí y que, salvo excepciones, no les interesan los más mínimo.
ResponderEliminarMe imagino mil conversaciones diferentes entre la 310 y la 247. Una podría ser: "Qué bien te quedan esas alforjas", "Gracias. Por cierto, cuídate que te estás quedando en el chasis".
:-))
La verdad Marcos es que me encantó salir con vosotros, los aficionados del siglo XXI, ja, ja.
ResponderEliminarY gracias por lo del blog, es una responsabilidad.
La única manera de que no las olviden es que las asocien con buenos recuerdos, y eso es responsabilidad nuestra, y yo al menos, reconozco que debía haber estado menos tiempo reparando y más montando, intentaré corregirlo.
ResponderEliminarMuy bueno el diálogo, menos mal que no había por allí una anoréxica 315R (no sé si el modelo está bien).
La clave está en asociar buenos recuerdos, efectivamente. En mi casa creo que posiblemente sean mis hijas las que me sigan, si es que algún día lo hace alguien. Ellas no vienen nunca al taller, pero sí montan, mientras que a mi hijo creo haberlo aburrido mucho viéndome desmontar motores.
ResponderEliminarEn mi próxima reencarnación lo intentaré hacer mejor.
Por cierto, señor, la Montesada es dentro de poco. Sé que es mucho pedir, pero ... ¿te animarás?
Por supuesto que no me perderé la Montesada Julian, lo que aun no se es como vendré, pero intentare que sea con moto.
ResponderEliminarHasta pronto
Celebro que mis fotografias hayan dado lugar a una nueva entrada "Nuevas generaciones". Por cierto José, mas que decirle que se estaba quedando en el chasis (de lo cual discrepo, pues la 310 "todavia" tiene una buena carroceria), creo que la 247 le estaba diciendo a mi 310 : "Despues de 20 años estas mejor que el primer dia ....."
ResponderEliminarCierto Eugeni, pero es que ya empezaban a quitarles "lorzas". Pero la conversación que dices también es válida; hoy en día se restauran motos dejándolas mejor que nuevas.
ResponderEliminarEl modelo está perfecto, Fernando. La 315R es una moto fantástica, por cierto. Lástima que el trial moderno no me llame (o gracias a Dios, quién sabe).
Hasta el 12.
Cuando mis niños crezcan si tengo la oportunidad de poder pasar un solo día como el que muestran éstas bonitas fotos con ellos y mis motos ya seré feliz...si además se aficionan y piden más ya será el éxtasis, y lo que hagan ellos en el futuro con su herencia (motos...porque otra cosa va a ser que no)me da absiolutamente igual.
ResponderEliminarPor cierto Fernando, si en el futuro volvéis a la zona de Targassone avísame. Nosotros veraneamos e hibernamos en Font-Romeu desde hace ya muchos años y aún no he tenido ocasión de trialear o "excursionear" por allí, y me apetecería mucho...y si además es en buena compañía imagínate !-
Nos vemos en la Montesa-da.
Un abrazo.
Jaume
Hola Jaume
ResponderEliminarSabes una cosa, en realidad hasta que no vi la foto con el momento congelado (hace poco), no valoré bastante la imagen y ahora me encanta.
Tomo nota de lo de Targassone, nos vemos en Tona :-)
un abrazo
Fernando
Hola a todos, un tropiezo el día anterior con la sherpa 350 destrozó mi rodilla derecha y me impidió ir a la excursión, pero fué un honor y un placer ver a Fernando montar mi cota 247, espero poder hacer esta excursión otro día pues ya estoy recuperado del todo. También es un placer ver coquetear a mi 247 con la 310 de Eduard, ya se conocían, para tal fin le hice estrenar unas cartucheras nuevas diseñadas en su día por Isern de Mollet, Estaban repletas de herramientas y bujas para que Fernando no pudiera quedarse tirado. Su comentario fué que la moto funcionaba muy bién, lo que me lleno de orgullo.´
ResponderEliminarRespecto al futuro de la motos con mis hijos creo que están aseguradas con mi hijo Pol, el de 12 años, que me dice que la chispa le va pequeña, que hay que momificarla para el futuro y que quiere empezar montar la cota 49, para en poco tiempo pasar a la sherpa 74. LLevamos muchas excursiones juntos, un montón de recuerdos.Un abrazo a todos. Juan R
Hola Juan
ResponderEliminarDe todos mis amigos, eres el que más ha motorizado a su familia !100% de los miembros¡. La Cota funcionó muy bien toda la mañana, no te lo dije por salir del paso, realmente nada iba mal, me sentí muy cómodo (y la verdad es que soy más bien puñetero para estas cosas).
Espero que tu rodilla no tenga secuelas, para repetir algún día la excursión.
un abrazo
Fernando